 | |
| Viento que me llevara,... |
Tras esa luz que lejana,
pareciera parpadeara,..
se oculta montaña y laguna,
que belleza nadie viera.
El verde siendo en intenso,
el fuerte del verde hoja,..
se pierde en un prado inmenso,
brillar del rocío que moja.
Los árboles siendo robustos,
cual viejos al paso de años,..
destacan de los arbustos,
grosor en raíz cual manos.
Simular de esas raíces,
que sacan brazos al sol,..
dando anchura al mismo tronco,
cual abrazo en emoción.
Acompañada le sigue,
verde de hierba salvaje,..
descrita con diferencia,
cual manto en ella desplace.
Suelta abatible y al ritmo,
como una melena larga,..
que el viento con mucho mimo,
pareciera que peinara.
Se acorta por el sendero,
que guía en su fin al lago,..
cual brindar de un caballero,
extiende chaqueta en halago.
Su manto de fina arena,
es de un dulce caminar,..
que un zapato es la condena,
de un pie en plena libertad.
Y en el volante en despliegue,
de las aguas cristalinas,..
parece arena de playa,
de oasis con luz divina.
Diamante en reflejos de espejo,
que en la salida a la luna,..
le muestra a los pies un cortejo,
cual blancura en su fortuna.
Darse un baño en esas aguas,
es placer que solo Dioses,..
en sueños puedan hallarlas,
y disfrutar en derroche.
Dicen lenguas pasajeras,
del traer llevando aires,..
que en tiempos que nadie viera,
eran dones de verdades.
Dicen que aquel que soñaba,
y derrochaba sus sueños,..
a cuatro vientos contaba,
que no era historia de cuentos.
Que un arco iris salía,
para quienes tienen fe,..
y no solo lo verían,
también podrían correr.
Cruzarlo y llegar al lado,
donde en melodía espera,..
el sueño en poder lograrlo,
perenne cual vida en tierra.
Paisaje que un día viera,..
Raic Ordóñez,.. 2011
