Dice la locura que se enfrenta al mundo en su soledad, todo me atormenta en su propia maldad, miro y solo veo ese despectivo que me entregan suelto, lleva multitudes de propios criterios, todos personales de esa gran cosecha que hace las costumbres, dimes y diretes de eso que pensando saca en conclusiones la misma ignorancia, nada que preocupe en falta de conciencia. Yo que te miraba con esa ilusión que ansia los sueños, que marca tendencias en mismo transcurso, que busca en confusos posibles que haya, y aparta conflictos con fácil desaire.
Ahora que te veo aferro mis ganas a misma ilusión y sueño en lugares que abunda el silencio, que no hacen balanza del mucho o el poco, que solo te miran al paso que dieras, callando motivos.
Mira la alegría de ese que no sabe el oculto existente, de ese que sonríe y ríe a carcajadas, todo en la ignorancia se lleva sin más.
Yo miro balanzas que van calculando lo bueno y lo malo, ese sopesar que no lleva garras en mis pesadillas, que marca tranquilos aún siendo aburridos del paso del tiempo. Mismas son las penas que en tiempo lloré, muerte de ilusiones en mundos soñados de riesgo al azar.
Conciliando el sueño me quedo en tranquilos de tiempos pasados, de aquellos lugares que guardo en mi mente como solo míos, en el mismo entorno que llevo mi calma, donde soy yo misma y no son disculpas retorno en palabras, donde todo surge en esa armonía que pintan los versos que arrastro en sus letras.
Donde la esperanza no se mide en tiempo,
donde el tiempo pasa en su libre pasar,...
y confía en tiempo lo que mismo siento,
siendo de este escrito más tiempo que hallar.
Donde en sus silencios vivo mis tranquilos,
donde nada aflige el mismo existir,...
y aunque diga cosas sin saber que digo,
sin repercusiones solo hay que vivir.
Raquel Ordóñez Marqués.
https://www.youtube.com/watch?v=LaJoDAXkSMw
