jueves, 2 de agosto de 2018

Grito por la libertad,...

Quizás sepas mucho de medicina, pues nadie te dice lo contrario, pero de la vida es ignorancia lo que de experiencias muestras saber. Y es que no se cura los derrumbes de la vida con una pastilla, ni amortigua el golpe de la desilusión , si es verdad que puedes quedar ausente de dolor en el vacío de ese encuentro con la medicación, donde se te aísla de todo tipo de sentimiento y se te abandona a un encierro de vacíos que ignoran la realidad. Luego está el teatro de las terapias a seguir, donde de continuo es una obra del engaño a la ilusión de entretenerte y se te ocupa con absurdos que solo tienen afán de demostrar su inteligencia para distraer al mismo tiempo.
Tiempo del derecho a decidir en que ocupar por las mismas personas que obligadas están a este teatro de hipocresía en receta.

En el mundo a ilusiones,
de un poder construir,...
se derrumban versiones,
que deciden por mi.

En lavados de cara,
cual función su teatro,...
no obtenías más nada,
que pasar otro rato.

Ese tiempo que cuenta,
cual contar sin descanso,...
es tan mío que en venta,
no es rentar de este manso.

Meditando en el mismo,
yo te obligo a pensar,...
si actuar en cinismo,
es el mismo contar.

Hoy exijo derechos,
de un perder por la cara,...
que hasta sacan provecho,
en quitar que me daban.

Hoy en gritos al viento,
secundar de un Quijote,...
solo tengo lamentos,
que me dan tus barrotes.

Yo derrumbo montañas,
y en saber de un escrito,...
ya te pongo la maña,
que mantengo en mi grito.

Grito por la libertad,...

Raquel Ordóñez Marqués.