domingo, 10 de noviembre de 2019

Capaces igual que tú,....

Vamos paso a paso, recorriendo un camino de piedras, que fueron obstáculo de tiempos y eras en el mismo transcurrir. Abriendo los ojos a esas miradas que llevan vacíos en el mismo objetivo, sembrando un indicio de muchos posibles. Y cada día que pasa, estamos más cerca de hacernos visibles.
Lentos, pero seguros de nuestros pasos, marcamos un ritmo de acorde a la realidad que se nos presenta, con predisposición de hacerlo real.
Quizás es que soy diferente, porque en si no alcanzo a tus propias metas, pero tengo alguna que simplificando era un objetivo de las mías propias. Un paso de iguales, donde consideres también mi opinión.
Ese gran camino de las diferencias, donde colaboro siendo como soy, y es que en si la vida no es una comedia donde se acomode los gustos de algunos, porque siendo tantos esa diferencia es solo la excusa de unos y otros, y estos que me siguen, van marcando pasos siendo una carrera, que solo en  alcanzarte ya persigue algo.
Miro tus opciones y se estigmatizan mis propios caprichos, ya que en ilusiones misma frustración marca diferencias que solo te siguen, pero si quisieras tenderme la mano, juntos aseguro que pueden lograrlo.
La vida es un sueño, y todos persiguen propias ilusiones, no mires vacíos, todo es un conjunto que llena el espacio.

No cierres el paso si es que van andando,
aunque en paso lento ellos tarden más,...
porque el que te quita no es que vaya dando,
de mismos posibles lo que a el le dan.

Todos somos alguien en esta carrera,
que sin piernas pide paso de igual modo,...
y aunque sean ciegos al mirar que  quieran,
miro en mi locura y es que entran todos.

Mudos que gritaban con sus propias manos,
sordos que entonaban esta melodía,...
y esos que en silencio nunca dicen vamos,
porque están tumbados todo el santo día.

Mira cuantos somos en las diferencias,
mira singulares sin pluralizar,...
y si mientras miras notas mi presencia,
mira cuantos somos de un poder contar.


Raquel Ordóñez Marqués