Mis hijos no son ni de Benavente, ni de Zamora, ni han vivido nunca en tales ciudades más que unas horas de visita esporádicamente, por lo tanto lávate la boca al hablar de ellos, por que desconoces todo lo que son y fueron, y nunca tuvieron nada que ver con vosotros, Hablemos con propiedad, infame no es el que dice la verdad, aunque el tono y entonante no te guste, ni somos ay, ni somos ya, ni nada que te inventes en esa mentalidad de ignorante imaginaria de subnormalidad, porque es muy fácil imaginarse estar en la identidad de un feto, para atacarle desde su más precoz edad, pero no deja de ser un atentado a los derechos y libertades, que parece no tienes facultades para entender.
Y si todos sabemos el juego, quizás ya no seas tan listo, juguemos todos, cada vez que sobrepases derechos y vamos a ver si le sacas provecho a tus juegos. Estas enfermo. Mira este gobierno que se lucra en mis escritos, y parece que los listos fueran ellos.
Y le pones identidad de otros a los muebles,
y les pones identidad de otros a los aparatos,...
y parece que te lleves,
lo que das en el maltrato.
Eres tonto no lo sabes pero ya te lo aseguro,
porque vas abriendo puertas en la misma identidad,...
del que usurpas con la mente cuando nunca fue maduro,
y le atacas desde dentro cuando dice la verdad.
Eres cáncer de la vida que inventando en tus ataques,
con las trampas que sugieres pides rezos en doctrina,...
y sugiero que las patas yendo ya es que las saques,
porque dice la verdad que en saberse se empecina.
Esas mentes enfermizas,... Deja las drogas.
Raquel Ordóñez Marqués.
