sábado, 13 de agosto de 2016

Asu solo pensaba,...

Basilio murió en esa noche de puntas y clavos, que focalizados en las gargantas, combaten en mismas amígdalas contra sus defensas.
Mª del Mar hija de Amparo, era quien ofrecía el demacrar de un despuntar en despiadados.
Ese clavar continuo de la locura en mente, mientras disfrazan las palabras con rostros perdidos.
Rostros de escaparates en inocencia y locura, donde la subnormalidad viene siendo fuente del despiste.
Quienes podrían "pensar" que aquellos que no lo hacen fuesen de la agresión un preparado a especies que reparten. La maldad es meticulosa en actos, inteligente en rastro y disfraz de muchos caminos.
El invisible de otras caretas, deja en el expuesto un camino de huellas a descartar, pero en la ceguera del afligido un rastro a tener en cuenta. como controversia de un seguimiento de improcedentes.
Acuse del tiempo que en tiempos juega en batallas mezcladas con tiempo para conjugar.
Batallas ya marcadas, como ganancias de una premeditación a las espaldas, que involucrando en zis zas va trenzando un enredo a la distancia entre tiempos.
Sumisos parecían sus actos, sumisos sus pasos y sin embargo solo fueron huellas en agua que se agita en tempestades de lejanía.
Tan ciega la vida en sus cercos.

Raquel Ordóñez Marqués.

Puntadas de la misma vida,...

Bea se esconde tras la cortina de la Iglesia, agazapada en su engaño para con el exterior.
Sumisa de apariencias utilizando los dedales en doble filo de puntadas que cosiendo, atan las alas de la libertad. Esa que tras batallas se abrió camino para volar en el libre que se describe.
Soraya solo es el reflejo de esa mirada ante el espejo, que nubla las expectativas de su madre. Marcos una goleada de diferencias, que desorientan los proyectos de su aparentar y Oscar ese lejano que despista.
Una familia coja, que entre ventanas oculta su verdadero rostro.
Si describimos al detalle, nos confirmamos en el ratificar de nuestros pasos.
Las garras que se te clavan como si de águilas fuera en su caza, secundar un salvaje en disfrazar.

Raquel Ordóñez Marqués.

Pesar de mis pasos,...

En los mismos enredos que las letras ocasionan con las palabras, existen también las intenciones. Intenciones que pueden llegar mucho más lejos de lo que en pensamientos puedas plasmar.

Vienen en acuse,
lo dan con palabras,...
y es mismo repulse,
de lo que se labra.

Unos te lo cuentan,
otros lo repiten,...
muchos aparentan,
pobre al que replique.

Plumas son la lanza,
tinta de mi sangre,...
muchos Sancho Panza,
viven de este alarde.

Dicta la locura,
manda Don Quijote,...
viva la cordura,
que guarda garrote.

Mueven los molinos,
me atacan gigantes,...
todo va divino,
deja los picantes.

Pico mientras digo,
digo lo que pienso,...
dieta del mendigo,
mastico y proceso.

Tiempos que saciaban,
despensas de haber,...
letras que me daban,
escritos de ayer.

Unos lo leían,
otros lo interpretan,...
muchos lo creían,
todos son caretas.

No juzgues de habidos,
de otros el pensar,...
siendo de prohibidos,
pisar sin mirar.

Raquel Ordóñez Marqués.