sábado, 12 de noviembre de 2016

Puntos de vista,...

en
Diferentes creencias, diferentes estudios, diferentes educaciones etc,....
Sobre todo se puede llegar a especular referente a una conducta.
En los inicios que sólo de ignorancia se tratara, las deducciones serían Maestra del adquirido.
Toda locura, es de la "cordura" educada, un estudio de especulaciones al acierto.
Dejemos aparte la demagogia,...
Toda educación se basa en pautas experimentales de conocimientos adquiridos y elaborados para secundar un estudio.
En este caso, la historia es, cada uno con su experiencia.
En ese espiral de conocimientos, donde se repiten las palabras y al uso llegan a ser atributo de un variar de comunicados, las diferencias, también son el inicio de un seguido.
Y del interpretado, que en libertad, no cuestione a las mismas diferencias.
No todos tienen el mismo enfoque sobre la vida y no por ello es merecer de menosprecio.
Basándonos en lo aprendido individualmente, dejemos que sea la misma ignorancia quien nos guíe, como común de plurales.Y metidos en esa burbuja de sucesos, de cuyo nombre locura es el arte, nos dejamos arrastrar por los misterios.

Quijote en los vientos,
dejando su rastro,...
trayendo argumentos,
de loco cual casto.

Visiones, batallas,´
historias de haber,...
las mismas agallas
son de suponer.

Victorias, derrotas,
romance y dulzura,...
al vuelo gaviotas,
menuda locura.

Iba protegido,
con esa armadura,
Miguel elegido,
Cervantes postura.

Se escucha, se habla,
y van murmurando,...
todo es una tabla,
de este ir calculando.

Mírame bien Sancho,...

Raquel Ordóñez Marqués.



Metafóricamente,...

El abandono era tal, que todos los enseres del hogar, se impregnaban del paso del tiempo. De la estabilidad que recoge el mismo en ápices insignificantes, que se magnifican en el constante.
El polvo hacía oficio de decoro, siniestra y sombría en la luz que le acompaña.
Al paso del mismo investigar, las garras imaginativas se apoderaban de la persona. Como un acariciar del miedo que te secuestra.
Que te trocea en interés de la mirada, dejando parte de ella en cada posición, en cada gesto.
El olor era un rancio húmedo, que penetraba en el cuerpo como hedor.
El revisar todas las estancias, fue ligero en tiempo, apenas cuatro habitaciones y un baño que de dos metros por dos era el espacio visible al mantener la puerta abierta.
Muebles semimordernos que le daban un aspecto recuperable en posibilidad.
 Era de imaginar, que el paso del tiempo, sólo era un abandono pasajero.
Un decaer de la personalidad al afrontar el mismo tiempo que hace frente a la vida.
La soledad compañera de cada individuo haciendo mella en la trasmutación de las edades.
Necesidades y carencias jugando en la balanza del equilibrio, contra el afrontar de la persona.
Y la pasividad elegida en el mismo paso que se recoge en el abandono.
Desilusiones en el transcurso de los cambios o etapas de la vida.
Nada que no fuera de recuperar bajo otras perspectivas, trabajado desde la ilusión y la esperanza.
La vida luchando y defendiéndose en el aprendizaje de vivirla.
Se encendió la luz,...

Fueron ventiladas las habitaciones en singular y retomando un aspecto más saludable.
La mirada ya no se quedaba sujeto en ese apresar de abandono.
La ilusión daba color a la sonrisa  y se manifestaba en intención de renovar.
Un paso al frente de la intención, daba recursos de cambios y modificaciones.
Y resurgió el soñar, las ventanas se abrían a las posibilidades y al encantamiento.
Y la puerta era una llamada en espera.

Un sueño encantado,....

"Pero sólo era un poeta quien miraba"

Raquel Ordóñez Marqués.

Si supieras,..

El poeta llena el alma,y se embriaga con el sentir de la vida.
Se libera en el acomodar y acochar de las palabras, acunando en entonaciones los ritmos.
Los medita y trasforma disparando acordes de sus entrañas.
Expulsa la voz del silencio en gritos rimados, en alientos de vida simples y compuestos.
Y descansa en su respiro, porque le paga el soñar de la esperanza.


En el arte de enseñar,
un poema me dejaste,...
en esa forma de endulzar,
este grueso que es el arte.

Raquel Ordóñez Marqués.