viernes, 16 de diciembre de 2011

Del movimiento que obliga,..

Que se apaguen los infiernos,
del mal que arrastra ese aire,..
y que el calor que no vemos,
sea el hielo que te embriague.

Llamas que en curso pierdan,
ahogares de penas completas,..
y al cambio de hierba fresca,
desvele en su afán caretas.

Flores crecieron al lado,
que corren la misma hilera,..
del ser que en carrera ha hallado,
movimiento que no hubiera.

Que se pare en tiempo,
curso pretendido,..
del mal en inventos,
cual habiten contigo.

Que se apaguen los infiernos,
que en vivir fueron seguidos,..
o que en su afán llene un sueño,
y el mismo te tenga cautivo.

Condenas son como ecos,
que en tiempo tiempo reclaman,
y en los mismos los tormentos,
del tiempo que nunca acaba.

De laberinto y quimera,
ciclos enteros de historias,..
y cuales mismos tuvieran,
recuerdo en su propia memoria.

Memoria que historia ejecuta,
cual permanencia es eterna,..
y muchas que se reclutan,
del descifrar de las buenas.

Cauces se cierran al paso,
de aquellas que sombras llevan,..
haciendo en las mismas traspaso,
que tergiversa y no quiera.

Y que el tiempo en sello,
que en el mismo es firma,..
en encierro de ellos,
cual olvido estima.

Raic Ordóñez,..2011

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