En el romper de tejidos,..

Cuando el vacío de nada,
de vacío está completo,..
ni en cosidos que abarcaran,
hilados de algún sujeto.

De lo que dieron contuve,
lo que en servicios cediera,..
y en transparencia mantuve,
querer que nadie quisiera.

De lo que dices que das,
nada cogí en el camino,..
en obligado pagar,
de tropezones continuos.

De sorpresas que no tuve,
alegría demostré,..
y en las promesas obtuve,
sueños que un día soñé.

Si me quedará en silencio,
cerrando con llave palabras,..
la vida tendría ese precio,
de siembra sin riego que labras.

Desgaste del roce en dos piedras,
que del sentir nunca fueron,..
tallos del brotar en hiedra,
que en un continuo crecieron.
Y arena en polvo creado,
que en el aire fue esparcido,..
cual ceniza de un quemado,
viaja en viento hacía el suicidio.

Del recorrido en seguidos,
que en brotes son diferencias,..
sombras de perseguidos,
que decoran la indecencia.

Como chantaje en el pulso,
de un cometido en latidos,..
de corazones que estrujo,
en partes de algún partido.

Y en ecos de historia que empujan,
siendo de huellas testigos,..
cantares y embrujos de brujas,
dan sentido a esos latidos.

Despierta que siendo inconsciente,
en sueños perdiste ese tiempo,..
que la oscuridad creciente,
arrastra en suspiro y lamentos.

Despierta y cobija en lugares,
costumbre en raíz segura,..
que en rezo de aquellos altares,
hizo escudo y armaduras.

Porque dormido estuviste,
en ese tejer de tejidos,..
y en el tiempo que cediste,
os dejó desprotegidos.

Raic Ordóñez,.. 2011