miércoles, 4 de enero de 2017

Juana la loca,... metafórico.

En las costumbres lingüísticas, hay muchas diferencias de interpretación, así como mensajes de las mismas costumbres cual diferencias.
De igual modo, hay "medios" que utilizan unas u otras costumbres, para comunicarse en incógnitas.
Tendencias aferradas a las mismas para pasar desapercibidas en sus propósitos.
Operaciones completas descritas y guiadas entre renglones de entretenimiento y despiste.
Que se alimentan del día a día de quienes en una ceguera de invisibles, aprovechan la misma vida para mantenerles apartados de ese saber.
Canales dispuestos para la discrepancia entre las mentes apresadas de ese ignorar social. Donde se calcula  la valentía, la solvencia y los conocimientos de aprender, mientras se exprime la experiencia de desconocidos que abundan en la pobreza que ellos ocasionan. para sumar en desorden un cuestionado modo de manipulación social entre invisibles. Y digo sumar en desorden, porque es de aplicar a modo de beneficio entre quienes aplican y promueven dichos hábitos desconocidos de haber.
Sin ser de mencionar, a no ser por seudónimos o historias de semejanza en vivencias sociales para promover de igual modo entre tiempos , lo que de soluciones a tiempos pasados fuera problemática de adaptar al presente, para camuflar un pasado que perdura en vivencias y expuestos obligados.
Dando en afirmación, soluciones de evolución y avance, por tiempos secuestrados y en beneficio de una servidumbre que esclavizada es silenciada en el preciar de la misma trama.
Claro está, que las explicaciones tampoco son de entendimiento y sostener por quienes no están enfrascados en dicha trama y que de averiguarse , es de tal dimensión, cual increíble entender, que en su mayoría no son poder asimilar para avanzar en un estado vivo.
De este modo, se van comiendo de tiempos, un presente de presentes que guionados van marcando una sentencia al mismo en su trascurrir y en la misma historia de mantener, ofician a modo de pasados que sostienen un futuro para el mismo desarrollo de incoherencias.
Dejando a la misma vida en un teatro de espectáculos previstos para el mismo encerrar que de vida tuviera, a cuenta de mantener una historia que suprime las posibilidades.

Hoy en día como tiempo atrás, se diria que todos aquellos que lo perciben o batallean han nacido avanzados a su propio tiempo, porque solo de ese modo sería un constatar de promover la locura y evitar la realidad.

Raquel Ordóñez Marqués.




Reciclaje o negocio,...



En este país donde vivimos, cohabitamos, entramos dentro de un grupo de alguien con quien  hablar, alguien que te pueda escuchar, alguien que pueda darte algún tipo de “vergüencita”.
La historia es fácil, sencilla y hasta un poco prepotente, meterles en la cabeza a los ciudadanos de este país que tirando una botella de vidrio al contenedor te hace especial. Buen ciudadano, buena persona y hasta te hacen creer que ayudas al medio ambiente, que con que tu contribución este planeta va a sobrevivir, que vamos a estar aquí para siempre.
Lo siento, si falto u ofendo a alguien lo siento en el corazón, porque lo lógico, lo ideal, lo fantástico es que por una vez los que están en representación de nosotros dijesen la verdad.
La verdad es que solamente es un negocio, mucho dinero, muchas ayudas o subvenciones para ayudar a todo ese desarrollo.
Desde un punto de vista “normal” lo entendería, estamos salvando la tierra. Y eso que merece que se nos recompensa, no? pues no amigos, eso pasa a ser una obligación.
En muchos países de nuestro entorno o no cobran el impuesto de la basura o bien te dan una compensación por hacerlo.
La verdad, amig@s, es que como siempre se están aprovechando de nosotros, de nuestra incultura, no se el porcentaje que supone que reciclemos para que en este país, las condiciones de vida mejoren, pero es ínfimo.
En realidad es que hay muchas empresas que se benefician de esto, los costes son menores, los trabajadores ya no son tan necesarios como antes, despidos, paro, mientras algunos se enriquecen por cada botella que tiremos en su contenedor.
Queremos mejorar el medio ambiente, claro que sí, pero no nos engañemos esto es otra forma de recaudar, otra forma de engañar.
España está a la cabeza de Europa en fraude en recogida de basuras, ufff!!! Qué raro, verdad?. Aquí si alguien se mueve es por beneficio propio.
En Zamora donde yo vivo y resido hay dos o tres empresas que están ganando dinero a espuertas a base de nuestra ignorancia, no quiero decir los nombres, todos los sabemos.
Solo pido una cosa, si queremos salvar el medio ambiente, si de verdad nos interesa la naturaleza, jamás deberíamos dejar en manos de empresas privadas esto, habría que reducir las emisiones, habría que reciclar, habría que hacer muchas cosas, pero nunca habría que hacer que unos jetas se aprovecharan de la situación e hicieran negocio con ello.
Ojala un día despertemos y nos demos cuenta que este país es un país de pandereta, te sientes bien tirando una botella a su contenedor, y pensamos que bien ya soy mejor persona, pero la lastima es que cada botella que tiramos al contenedor lo único que hace es enriquecer a unos pocos que las “reciclan”.
Eso tampoco es verdad necesitan arena para hacer botellas, arboles pàra hacer papel, etc. lo único que si es verdad es que les ahorran costes.
Siento mucho si alguien se sentía mejor por tirar una botellita al contenedor de las botellas, pero la realidad es otra, solo es otra forma de manejar al débil, haciéndole creer que son buenos, y eso está bien pero no os equivoquéis, todo es otra gran mentira.