sábado, 31 de octubre de 2020

Sueños e ilusiones,...

 


En ese principio que lleva un final escondido, donde el pensamiento solo es el dueño de lo que maneja, donde ya no queda ni duda ni excusa por que lo vivido zanja las cuestiones, donde los detalles no hablan de secretos ni desconfianza, allí es que te espero,...

Dicen las intrigas que ya no me quedan dudas por tener, que no se sujetan en cuestión ninguna, que incluso la magia se niega en su cauce a crear misterios, que ya no te tengo y eso es lo que hay, lejanas quedaron las mismas caricias, y en mismas tinieblas se queda el recuerdo.

Tiemblan los suspiros en rememorar, alientos unidos que alivian el alma, que miran al tacto que les deletrea y les va guiando en el mismo sentir, ese que sujeta mismos alicientes, el que sueña ausente de la realidad, el que dictamina la misma locura, siendo quien trasporta a un cielo pintado.

Solo una mirada,....

Dicen que te quise como no he querido,

ni el mismo recuerdo quiere recordar,...

y queda en leyenda todo lo que he sido,

y el mismo suspiro te hace suspirar.


Dicen que te llevo en el mismo alma,

dicen porque dicen y quieren decir,...

y es que tu recuerdo me lleva a la calma,

que en las ilusiones me hace sonreír.


Sueño en la costumbre de nunca perderla,

sueño porque sueño y así estoy en paz,...

y si nada pienso puedo distraerla,

a esta mente absurda que sueña sin más.


Raquel Ordóñez Marqués.