palo andante que delante es de mirar,...
lo que en egos sirve en fríos de esa fuente,
que en primeros es el mismo delirar.
Posiciones de egoísmo en privilegio,
que en pelusa van marcando en la constancia,...
lo que miro de al revés en este espejo,
que en reflejos solo muestra la elegancia.
Son visiones saltarinas en intentos,
de llegar siempre el primero en ese estar,...
sujetados por los hilos que de vientos,
en peleas se mantienen en afán.
La cabeza un movimiento de soltura,
cual caballo se reclina en reverencia,...
desafío de carreras en locura,
que de tantos no es posible transparencia.
No hay escape en esta lucha sin final,
todos corren deseando ser primeros,...
y el destaque es la pelea de un llegar,
a ese filo que les alza en su recreo.
Las envidias son motivo de adelanto,
prepotencia que trasmite un empujón,...
vanidad que va en escalas del espanto,
de ese podio que mantiene un escalón.
Ya no llega de humildad algún posible,
todos quieren destacar sin miramiento,..
y es que en contra de llegar está el factible,
que retrasa en su pasar el mismo tiempo.
Raquel Ordóñez Marqués
