sábado, 18 de enero de 2020

Pasajeros de tercera,...

Dícese pues se cuestionan las formas, que vamos hacia una inclusión, donde todo aspecto y carácter se reconoce como una diferencia a distinguir, para obtener una aprobación de toda esa sociedad sin analizar y por tanto sin cuestionar o diagnosticar, para ver sus necesidades.
Pero dícese de igual manera, que hablamos de la inclusión, que retraso pues por gestionar, ante las mismas necesidades que pudieran ser a diferencia diferentes habilidades o barreras puestas por la misma humanidad para verse superiores en vete tu a saber cuales medidas por descubrir.
No me considero más que nadie, pero menos tampoco, y veo un entorno de muchas carencias, donde las ayudas solo se gestionan dependiendo gustos, esos los principios que marcan tendencia.
Hablan unos pocos, de como es el modo, otros ya se amoldan a esas costumbres, muchos justifican no haber aprendido y esos que lo ignoran preguntan porqué.
Ahora me conformo, simple la postura a un acomodarse, nadie lo cuestiona y van a balanza los que menos saben, los que no aprendieron o se dificultan sus pocos posibles, porqué no me aceptas ?.
Porque en el recurso quedo siempre fuera,  nada sé ni aprendo, nada me conmueve, nada me motiva y voy en declive, no soy tan común, busco las maneras y no las encuentro, solo veo dedos que a mi me arrinconan, que marcan un sitio cual permanecer.
Siempre tan aislado, es como una lepra que distingue algunos, solo me trasmiten más desconfianza.
Y sigo pensando que somos iguales, solo me he colgado en propias vivencias, esas que me hostigan en un repetir, que mantiene inerte a mis propias ganas, nada me despista, nada a mi me lleva a la realidad y es tan repetida mi vida en continuo, que ansío motivos de algún descubrir.
Voy viviendo tumbos que igual se repiten, tiendeme la mano sin dar más remilgo, no me dejes fuera, voy sujeta a tientos que a mi me despistan y que tu mantienes como una barrera.
Solo te doy asco por muchas carencias,....

Y en el cuento vivo mimo en el sobrante,
que ante circunstancias finges sin remilgo,...
y en presente vivo lo que en dilatantes,
es pasar de todo y mirarte el ombligo.

No tienes maneras en esta disculpa,
de medir las formas que a mi me rechazan,...
ni te estoy culpando porque nunca es culpa,
del que se acomoda y es un Sancho Panza.

Somos de tercera sin venir a cuento,
somos esa escoria que has de rechazar,...
porque no tenemos ni pa darte tiento,
en gula que admitieras de un poder cobrar.

No tenemos precio por que la etiqueta,
ya marcaba saldo bajo en misma cifra,...
y en el desaliento solo somos jetas,
cual precio pagamos en la misma rifa.

Ahora que te veo no miraba nada,
siendo ese vacío que en la vida toca,...
porque en ella misma yo me acomodaba,
sin saber quien era y aún estando loca.

Digo lo que pienso aunque te moleste,
no me hago preguntas ni cuestiono nada,...
y si te preocupa deja que te preste,
lo que he recibido desde tu morada.

Raquel Ordóñez Marqués.

domingo, 12 de enero de 2020

Vive tu vida,...

Que fácil es llegar a conclusiones, de que manera especulamos sobre las posibilidades y nos hacemos un propio criterio que solo conlleva a una especulación. Como nos creemos la misma y de lo que somos capaces por hacernos escuchar, aún sin saber si la razón fuese un cometido.
Es tanto lo que se mueve a nuestro alrededor, que mantenernos confusos es cuando menos no ser participes de inmiscuirnos en circunstancias ajenas.
Nos dicen, nos cuentan, todo es un laberinto de dimes y diretes que se contradicen dependiendo quien o quienes lo digan.
Vivo un solo tiempo que se configura en momentos y aspectos de igual en lugar, no escucho las formas que en mismo misterio mueven contenidos, yo solo aseguro el mismo que vivo, nunca hay más dilema que contradecir, si no lo he vivido no aseguro nada, ni aunque me lo cuenten.
Soy como ese estigma que vive sus propios, todos tan seguros, que igual se aseguran el sobrevivir.
Vivo y no confundo posibles que haya, no son un misterio pero igual resisto  a las mismas ganas que dan opinar, yo no fui testigo, como puedo entonces dar mi parabién.
Son sus circunstancias, llenas de problemas y de discusiones, todas ellas puestas en sus propias vidas, duda inigualable en las mías propias,  yo no fui testigo, queda en los posibles versiones a pares, unas contrapuestas de otras que aseguran, muchas indecisas y otras imparciales, vidas diferentes que se van juntando en esos criterios que alteran el orden, que buscan concisos, vidas paralelas.
Yo es que no me mezclo, solo soy testigo del mismo que vivo, no aseguro nada, todo es un posible en una circunstancia pero no se en cual.


Digo pues supongo que bajo las pautas,
todo es un posible de un poder haber,...
y aunque no te diga porque quede en cautas,
digo porque creo que es de un suponer.

Son suposiciones dicha mayoría,
son de la ignorancia de un poder decir,...
y si te lo digo porque lo creía,
es dicho que lleva un mismo vivir.

Vivo en los supuestos que todo confunden,
no aseguro nada porque no es mi causa,...
y si les confundo porque igual lo asumen,
es del mismo tiempo una simple pausa.

Pausa que secunda un tiempo perdido,
pausa que les lleva a ese perseguir,...
pausa en la que queda ese mismo herido,
que del tiempo es pausa en propio existir.

Tiempo que se ajusta de un perder de tiempo,
tiempo que confunde a ese proceder,...
y enredando el tiempo es procedimiento,
de un tiempo perdido sin saber porqué.

Ahora que lo pienso no he logrado nada,
ahora que lo miro tiempo fue pasar,....
y cuando me duermo voy sobre esa almohada,
que en el mismo tiempo no era descansar.

Tiempo que secunda a mis circunstancias,
tiempo que asegura ese proceder,....
es el tiempo justo que da relevancia,
a las mismas causas que son sostener.

Raquel Ordóñez Marqués.







martes, 7 de enero de 2020

Llegaremos a tiempo.....

Cuando hablamos de igualdad, dejamos muy claro el mismo que otorga, no entiendo ni como haces diferencias, no entiendo que sabes que se considere completo de un algo, hay tantas carencias, unos aprendieron lo que otros no saben y otros en sus puesto son inigualables en esa materia, todos tan distintos y tan diferentes que aprender lo mismo no es venir a cuento.
Hablo en el profundo que se justifica mirar hacia dentro, hacia ese vacío que guarda silencios de un morder de lengua, de causas tan justas que en la misma vida, ya se justifican muchas circunstancias, esas diferencias que vas destacando, haciendo posible que hasta la simpleza parezca importante, solo considero que es superficial, mira lo que sabes de un tiempo seguido de aprender de cosas, solo te hace grato en esas que sabes, otras quedan grandes en tus intenciones, otras te hacen chico, tan tan chiquitito que hasta mopa en polvo es de agradecer.
Somos tan iguales y tan diferentes, que mis pensamientos ya se justifican en pensar en algo, algo que es de propios un mismo criterio, ese afán de lucro que se contamina con los exclusivos, ese que conforma un solo criterio, algo que secundan las mentes vacías. Algo que promueven los que nunca piensan, los que se conforman con que otro dirija, esos que en el fácil se mueven constantes.
Los que solo miran sus propios ombligos,...

Hace tiempo supe que en las diferencias,
todos son iguales de ese conjugar,...
que marcando ambiguos son misma evidencia,
de un mismo confuso que hay que confirmar.

Solo voy buscando la igualdad que doy,
aprendiendo siempre en esta ignorancia,...
porque más no puedo y soy lo que soy,
y de nada sirve mostrar arrogancia.

He llegado a tiempo de verte presente,
voy optando justos en misma igualdad,...
y si me despisto o me muestro ausente,
no es que me descuide en lo que me das.

Muestras ignorancia de lo que buscando,
es vender a gritos por tu propia boca,...
en las diferencias que vienes mostrando,
de ese que aprendido solo a ti te toca.

Eres un vacío de esas ocurrencias,
que saliendo a flote puedes inventar,...
despistando a todos como es evidencia,
para irte lucrando de lo que no das.

Somos ese tiempo que marcando fines,
ya está estipulado en el permanecer,...
y aunque no lo creas o así no lo estimes,
es tiempo que dicta lo que está por ver.

No he llegado a tiempo de abrirte los ojos,
no he tenido tiempo de verlo lograr,...
pero sin embargo no queda en despojo,
el que el mismo tiempo le de su lugar.

Ahora que me miras te dejo mi huella,
siendo voz de aquellos que has de ignorar,...
aunque en pisotones bien me pise aquella,
que en protagonismo siempre hace callar.

Raquel Ordóñez Marqués.



sábado, 4 de enero de 2020

Sueños imposibles,...

Entramos en una etapa nueva, llena de pactos y treguas que se solicitan en el mismo trance, he ahí, esa parte de la sociedad, que vive de sectas, que vota en constancia, criterios ajenos de ese proceder, que guarda disputas que va en diferencias del mismo criterio.
Se han llevado tanto en años continuos, que hasta me parece el pacto en continuo de tregua en seguidos que marca ese turno.
Turno en diferencia de unos y otros que siendo los mismos solo dan un juego que en misma destreza va variando causas.
Ahora es Presidente, llega la pregunta de causas y justos que están en proceso, ¿Qué podría hacer en la sociedad para irse ganando votos de un futuro ?. Tantas son las quejas, que entra en imposible causa que me expongas. Digo pues divago en misma locura, tengo ese criterio que me justifica en la desconfianza, que nunca se lucra de aquellos que piensan, los que me producen tanta incertidumbre.
Los que bien arreglan injustos que haya, los que con promesas te cambian el mundo, y suben tributo de impuestos que marcan. Son como una plaga que va deduciendo que comen primero, si la confianza o debilidad que pide en pobreza pocos de un posible, o la controversia que va en desafío de mismas promesas armando barullo, no son inmortales, solo van llenando sus propias barrigas, dicen y prometen todo lo que en sueños dice sociedad que tiene en carencia, pero pasan años y siempre es lo mismo, cambia la disputa pero igual que el zorro mañas ya son viejas.
Esa telaraña que siendo una trampa se amolda y seduce diferentes presas, todas ignorantes de su propio fin si pisan la misma.

Medio siglo dice que siempre nos mientes,
que dictas maneras de causa en injustos,...
pero en frío llegas sirviendo en la fuente,
tiempo que es testigo de ausencia en el justo.

Si defiendo causas es a la ignorancia,
esa que seduces con tiento y acierto,...
de lo que en el tiempo queda como pausa,
y en los sueños marca igualito reto.

Mira bien las viñas pues traen en cosecha,
vino que en el roble años son cuidar,....
con el mimo justo que bien se aprovecha,
y en el mismo gusto nunca es olvidar.

Voy deleitando la vida que vendes,
voy recordando las mimas promesas,...
y lo que en propio tu mismo pretendes,
no es del vendido lo mismo que expresas.

Tiempo es testigo de paso que dieras,
tiempo te dejo para demostrar,...
que lo que el tiempo mismo sostuviera,
del mismo tiempo ya es un retar.

Raquel Ordóñez Marqués.




jueves, 2 de enero de 2020

Mientras te crees superior,...

Solamente veo la misma ignorancia, que entre la arrogancia se abre camino, muchos inexpertos con vidas muy cortas que han leído aquello que les hace aptos. Aptos inexpertos con aire en grandeza y mucha soberbia en creerse importantes.
No han tenido vida suficiente como para respetar al prójimo por su propia libertad, lo cuestionan todo en esas conjeturas, que sopesan actos de unos y otros, y hasta dictaminan sin miedo en proceso lo que conjugando es juego de ellos.
No han tenido tiempo de medir las causas, nunca contradicen pautas en proceso y en ese criterio que ya viene escrito, juzgan por iguales casos diferentes.
Un comportamiento más bien infantil,...
Y es que titulados han salido todos, los que memorizan causas en proceso, y en la misma vida no han tenido tiempo, de vivir vivencias que den diferencia, dime que criterio es de establecer.

No sabían nada todo se lo inventan,
no han tenido tiempo de mirar atrás,...
y si se confunden a ver si revienta,
lo que en ignorancia puedas demostrar.

Es como esa infancia que siendo pequeño,
va siguiendo pasos de una adolescencia,...
que en propia ignorancia de adulto ya es bueno,
porque prevalece la misma prudencia.

No sabia nada la vida me enseña,
no venia al caso ir especulando,...
pero mi ignorancia solita se empeña,
en mismas caídas irme enseñando.

No he tenido tiempo de mirar la vida,
fui memorizando datos que me das,...
y si no he caído en esas intrigas,
es que fui ignorando ir mirando atrás.

Ahora me lastimo en esa soberbia,
que fui demostrando en misma ignorancia,...
y esta alfombra roja te cubre la hierba,
que yo te pisaba dada mi arrogancia.

Natural parece este aprendizaje,
que la misma vida te enseña en el tiempo,...
y es que de ignorantes bien somos salvajes,
dando lo que dicen en procedimiento.

Ahora con criterio veo lo que dices,
ahora que los miro veo diferencias,...
y lo que ignoraba que antes no lo quise,
arrepentimiento me da en consecuencia.

Soy un ignorante viviendo la vida,
soy esa frecuencia en mismo tropezar,...
pero si me escuchas deja que te diga,
que llegando a tiempo bien puedo empezar.

Raquel Ordóñez Marqués.