sábado, 3 de noviembre de 2018

La Navidad,....

Se aproximan fechas de preparaciones, de nostalgia viva en en empeños mutuos de supervivencia, de pasar inertes ante situaciones, que absorben el tiempo en su caminar.
Mira en estas fechas que cantando pasan, toda la tristeza en este celebrar, y en reproches llevan lo que en la templanza, no serian capaces ni de un destacar.
Cuentan sus historias, mitos familiares, de esos que en consigna son de gestionar, con inventos puestos en mismos altares, que rencores dejan en su descansar.
Tiendas decoradas, precios que tentando son del mismo rito que llevan costumbres, cenas suculentas que bajo miradas se quedan perdidas y observan la lumbre.
Ya no hay fantasmas, ya no quedan brujas, es un disimulo de permanecer, de lo que en recuerdos de la infancia estrujas, para en mismas fechas celebrar que ver.
Se han quedado mudos y sordos al paso, todo era un susurro de este que apartar, y es del mismo uso ley que atando nudos, cuenta en sus historias de alguien que matar.
Son esos pecados de costumbre añeja, mismo desconsuelo que de fiesta sigue, y en la tolerancia hasta se hacen viejas,... y de tiempo a empeño todo se consigue.
Viva el nacimiento de quien en su vida, todo lo que hace es el bien ajeno, y las del esfuerzo de esas mil barrigas, que con sus traiciones siembran el veneno. Son como un capricho de la misma historia, que en sus educados y el mismo abreviar, dejan en perennes para tu memoria, un castigo eterno de este celebrar.
Fe de aquellos puestos, que sirviendo dedos, obran de maneras que son controlar,...
Para que en los restos, ir rezando credos, marquen un mercado en religión que dar.

Ya no quedan buenos, es un retorcido, que en la picaresca dulce es su entender,....
porque en mismos llenos, todo lo ofrecido, es un sufrimiento de un reconocer.

Raquel Ordóñez Marqués.