domingo, 31 de mayo de 2020

Porque no te fuiste,...


Con razón o sin razón, las costumbres nos arrastran, durante este tiempo hemos compartido los días con miedo, miedo de esas fases que nos dejan solos sin más compañía que la que se mueva en la tecnología.
Abrazos y besos quedaron pospuestos en muchas palabras, diálogo expuesto que en la cercanía de dichos constantes, le da a la distancia un mismo interés.
Hemos aprendido a guardar las distancias, sin estar dispuestos a permanecer en esas maneras, todos extrañamos lo que en las costumbres es permanecer de un mimo constante, es la soledad lo que todos temen. Lo que hace que pienses en muchos dilemas, lo que te conlleva a ese aislamiento que surca en profundos recuerdos y modos. Y lo que se expresa en un simple abrazo que no necesita ninguna palabra.
Cómo reconforta retomar las formas en significados, mira esos abuelos que ahora sonríen, se les hizo eterno el tiempo que cuentan, se les hizo eterno, porque en su descuento la suma les resta posibles de haber. Ahora con prudencia y una buena higiene dicen que es capote del mismo despliegue.
Un solo aliciente ir muy despacito, paso en paso estrecho que apura los metros desde donde miro, desde esa distancia que marca dos metros para respirar, que lleva una máscara que cubre sonrisas. Que amplía los días y le da sentido a la precaución.
Un refrán antiguo decía que solo se pega el escrúpulo, que la vida es dicha del mismo destino y que nada expone lo que se depara en el mismo que hay.
Miro la ventana que cierra la vida, la que se descubre con la misma pena, que miraron tantos en la soledad, la que solo ansiaba un abrazo a tiempo o ese último beso de una despedida. 
Llevo el luto puesto en mi propia alma y rezo a ese justo que en mismo abandono se olvidó de tantos, que en este camino de piedra y desierto hizo en las distancias cubrirse en el manto de llantos de olvido.
Cuanto más lo pienso más me sobrecoge.

Y te digo adiós y sin conocerte,
para que tu alma descanse y en paz,...
y te digo adiós en la misma muerte,
aunque misma pena fuese soledad.

Mira en este paso que nos une a todos,
como el luto impone recordar por siempre,..
lo que de la historia ya es del mismo modo,
siempre recordarte y tenerte presente.

Ahora que lo pienso solo nunca fuiste,
porque en huellas dejas pasos en vacío,...
que con tu recuerdo llenas y no viste,
porque tu recuerdo no caerá en olvido.

Raquel Ordóñez Marqués.