Lo que tu ves un defecto son los gajes de la vida, tu manera de mirar son los limites que marcas, lo que mismo se descarta en tus opciones, y por eso son cuestiones que se abren sin cesar.
Discusiones y disputas controversia y contradicho, son remilgo en propio juicio que juzgando va a la vida y por eso el que se diga es aquello que practican, por que quito el hierro al mío si disparo contra ti, y cuestiones son aquí, las que pongo en tela a juicio y quizás sea conciencia quien se hería por diretes y por tanto es al retrete donde había que tirarlo, y de nuevo el sopesar es balanza que se inclina, porque ya no contamina lo que tengas que decir y mejor si es así, por que en si a mi no me importa.
Circunstancias son diversas dependiendo quien las viva y de igual es el criterio quien te dicta en el camino y quizás sea destino de nacer con tus costumbres, porque le echas a la lumbre más astillas de la cuenta, y te cubres la careta decorando de otros vida y aunque digas lo que digas es el karma quien se cobra. Deberías darte cuenta de lo mismo que te ofrece y dejar de ser quien crece en la historia que mantienes, por que solo es que entretienes a ignorantes que te siguen.
Y por eso que se diga lo que tengan que decir,
pues diciendo llevan rastro de encontrarse entretenidos,...
y que escuchen los que quieran porque tengo que vivir,
y las formas que tu tengas no son formas que yo pido.
Y limitas con maneras que tu tienes en pensar,
y las leyes llevan huella de los pasos que han surgido,...
regocijo de las formas que al vivir son las que dan,
y te mueves en las aguas que ya son mismo podrido.
Es un circulo vicioso que en sus vueltas muerde cola,
como esa pescadilla que en corrillos se mantiene,...
y te aíslan y te oprimen porque quieren verte sola,
siendo lenguas viperinas del saber que se entretienen.
Raquel Ordóñez Marqués.
