Cuando no te ven,..

Se pierden en cuatro letras,
que aparta vida en lección,..
y en las mismas te concretan,
que no prestes atención.

Deambulan en el perdido,
siendo maestros que ignoran,..
lo mismo que no han aprendido,
porque tampoco valoran.

Y es que la vida es testigo,
del tiempo pasado en todos,..
siendo de esclavo o cautivo,
apoyo del ojo sin codo.

Requieren el dar opiniones,
del valorar de ese nulo,..
que cierra al completo en opciones,
escaparate y más bulos.

No miran pues cierran los ojos,
al real que en lo ficticio,..
destaca en intrigas los piojos,
tapándoles el precipicio.

Y te dan en trato de escuelas,
sin estructura en la misma,..
el subir de escalón de escalera,
lo que en ejemplo es su cima.

No miran nunca más alto,
pues siguen dormidos y ausentes,..
pero en sirena ese canto,
es el que tienen presente.

No buscan nunca más lejos,
que el reflejo en propio espejo,..
que en avistar del complejo,
lo que en vacíos te dejo.

Y se pintan un paisaje,
de colores permanentes,..
sin ver ese camuflaje,
que les mantiene en ausentes.

Si al sordo en vista no pones,
lo que en el ojo perciba,..
del dicho te da en opciones,
lo que de boca no digas.

Al ciego la oscuridad,
si es de taparse los ojos,..
el claro que niega en mirar,
es propio miedo en despojo.

Y a la ignorancia que ignora,
de la enseñanza que anula,..
nunca en cerebro le aflora,
cual percibir no es cordura.

Raic Ordóñez,..2012