Cuando perdieron el norte los centrados, quienes obtusos son del disparate arte en un disparar sin cese de propósito en pensar.
Se aclararon las miradas de perfil, se cerraron esas puertas del criterio,.... y se medita en conciencia de habereres completos.
Las medidas,vienen siendo a modo de costumbres sin obligación de segundos que en terceros, perdieran su orden.
Si nos centramos en un solo lugar de estar, que del cierto sea el correcto de un exácto, el paso es firme de un seguir. Nulo queda el despropósito de hallar, si en el mismo es huella que de la vida no es aliento en expulsar, sin dejar el rastro de un vivído igual.
Remedios es de buscar, si en el trago del camino, destino en piedra es caer, y al desangrarse en total, las huellas son devoradas por miradas de un perdido, que cause intriga a ignorancia.
La inteligencia a día a de hoy, queda anulada de un posible, trás comprobar el circulo vicioso y desquiciante,.. Que hace del constante una pesadilla de seguir en voluntarios libres.
Y como de la obediencia todos aquellos que arrastran complejos de repetirse, es de obligado cumplimiento sin excepción de interponerse en lo novedoso en descubrir.
Desprepósito total sería negarse al avance que de circunstancias es que diferencie en tiempos habídos y posibles.
En los habídos, está la historia que conmemora el seguimiento del mismo avance, hasta llegar a los tiempos que vivímos en misma intención del detallarlos.
Y de los triunfos, pasos y constancia en descubrir, mejorar y acomodar los sentidos en el confort de los sentimientos y vivencias. Las convivencias y diferencias, solo forman parte de ese seguído que avanza en el tiempo y recoge de esencias y saberes, despropósitos de torcídos, que variando el sentido de las intenciones, confunden y estancan, formando diques que dejan el avance entorpecído.
De ahí que la inteligencia, sea puesta en duda de intención de hallazgos que marquen un seguir del mismo. Si la misma, no se viera en perdidos de avanzar, ante el muro de dificultades, que anteponen los valores de accepciones a interpretación.
Y para interpretar la vida, que además pudiera ser de posibles entendimientos en un seguir, cuando el reducído ya es del seguro, tiempo que dispone cada uno. La inteligencia pierde firmes de posibles que accesibles no están al alcance. Y además si es de ver que inteligencia comprobar, se daría cuenta del imposible que marca un fin determinado.
Once segundos, cien metros,.... de que sirve un record, cuando el ímpetu que se subestíma a uno mismo es en desafío, saber de poco motivante.
Del seguro las trampas, adelantaron a la cordura en la comodidad del mismo ignorante a relajarse, y se antepone a la evolución, por vagancia de intenciones al confort de lo exquisito.
Prioridades que detallan, donde se quedó la inteligencia de un poder que la mantuviera en su destino.
Mi hija ganó una medalla de oro en natación, pero en el reflejo de haberes y comodidades, se detallan nublados que no determinan quien lo hizo.
sI de intención no fue pararlo a tiempo de un estanque en la permanencia de interrumpidos. El quiebro de grados de distancia, en la que se habíta de un acceso perdido, ya es del retraso una losa en contra de movimientos y triunfos. Paralizarse en esa comodidad, es determinar a la inteligencia cerrada de posibles a un esfuerzo.
Desolador,......... quiero estar en la soledad que da el silencio que no me interrumpe el respiro.
Raquel Ordóñez Marqués.
29/07/2015